El Excelentísimo Apóstol de Jesucristo, Naasón Joaquín García, vino al templo de Pomona esta noche. Él ya sabía: aquí no hay nada especial en atractivos turísticos, estamos a dos horas de Belize City, el poblado es chico, no es una Iglesia de muchos miembros, pero los amó. Los quiso consolar, conocer, alegrar y lo hizo.