HomeAgenda ApostólicaPresentación Apostólica en Villahermosa, Tabasco Agenda Apostólica Presentación Apostólica en Villahermosa, Tabasco (Coordinación de Crónica Apostólica) — Llegó la bendición de Dios al bello estado de Tabasco. En la ciudad de Villahermosa, colonia Tamulte de las Barrancas, se dieron cita las iglesias del estado. El P.E. Pedro Ramírez Vázquez, pastor corregional de la República de Honduras, comenzó el culto de adoración. Su tema se centró en el reconocimiento al que ha recibido el ungimiento de parte de Dios. A las 10:50 horas, aproximadamente, hizo su arribo el Apóstol de Jesucristo, Naasón Joaquín García, a la iglesia, que manifestó en sus actos el aprecio de todos aquellos que ya han recibido en su corazón su elección. Después de la oración de Gracias, los hermanos entonaron su alabanza: Bienvenido Apóstol Naasón…. ¡Tabasco le ama con el corazón y le aceptamos, oh Siervo de Dios! El D.E. Daniel García Carrillo, de la iglesia de Ocuitzapotlán, aquí en esta ciudad, tomó la palabra para expresar, a nombre de los hermanos del Estado de Tabasco, unas palabras que llevaron consigo el sentimiento hacia la elección. Reiteró el amor y el reconocimiento que los motivaba a dar la bienvenida a este lugar. La salutación del Apóstol de Jesucristo fue: “Aclamad a Jehová porque él es bueno, porque para siempre es su misericordia. Casa de Aarón… Casa de Samuel… Casa de Naasón Joaquín, alabad a Jehová porque para siempre es su misericordia. Voz de júbilo y de salvación hay en la tienda de los justos, Por amor a mis hermanos y mis compañeros diré yo: La paz de Señor sea contigo.” Invitó a la Iglesia, en la alegría que sentía, a entonar la alabanza número 509: Si oscura fue mi vida…. Recordando la noche triste que tuvo la iglesia cuando Dios recogió a su Apóstol Samuel, pero ahora estábamos en un bello amanecer. Su palabra, expresó, no era solamente de ánimo, de consuelo o de invitación a la batalla, iba más allá por cuanto había visto a los enemigos blasfemar y crujir sus dientes, por ello, en ese día y en ese lugar de Tabasco, quiso dar su primera defensa a su ministerio, no por temor, ni porque le importara lo que piensen los necios, sino para dejarle a la iglesia una enseñanza: la alegría, el regocijo, el gozo de los hermanos y su llanto, son manifestaciones conforme a la doctrina, para que nadie los menosprecie, se burle o los califique de fanáticos. Recordó que en su visita a Oaxaca, vio los rostros de los hermanos que se acercaron a él para honrarle a través de cantos, poesías y palabras, su timidez los hacía bajar a vista. Timidez que sin duda viene por el maltrato, discriminados por su condición racial, humilde, situación económica o por su fe. Fue en el momento que, al ver a una pequeña niña empuñar su mano diciendo: Seguro se halla el aprisco, que se conmovió su corazón y el ardor del amor de padre, dado a su corazón por Dios, le hizo asegurarles que para Cristo son muy amados. Para el Apóstol de Dios esa niña fue un símbolo de la iglesia, por eso su deseo de marcar en los corazones, en las mentes y en las almas que no están solos, que hay quién los ama, los defiende y los protege, para que nadie los minimicé o los juzgue por su fe y reconocimiento a la elección. Expresó que los saduceos y fariseos modernos los atacan porque la iglesia lo ama. Por ello invitó a leer en Malaquias 4:1-3, para dar a entender quiénes son los que se alegran. En esa profecía que habla del Hijo de Dios, que vendría el sol de justicia, y que muchos saltarían como becerros de manada. Y se cumplió. Varios textos de la escritura manifiestan las acciones de aquellos a los que Dios abrió sus corazones para recibir al que Dios había enviado. Mateo 21:22, Juan 12, Mateo 9:21, Mateo 8:8, Lucas 7:36… Palabras de honra, de alegría, con palmas, con hosannas, hubo quién con sus bienes servían, honraban, buscaban agradecer a quién les había mostrado misericordia de parte del Señor. Tenían por privilegio atenderlo, servirle, invitarlo a su casa. Si estaban recibiendo de parte del Creador tan grandes bendiciones, a unos salud, a otros vida, a otros, salvación ¿quién pude permanecer apático ante tal magnitud de beneficios? ¿Y a los apóstoles? Como dijo Cristo acerca de Pablo: Te he puesto por luz a los gentiles a fin de que sea para salvación hasta lo último de la tierra. Luz que no es el sol pero que se desprende de él, que es Cristo. Tú en mí y yo en ellos, dijo el Señor, para que seamos perfectos en unidad. En Lucas 10:16 establece el Hijo de Dios que el que recibe a los apóstoles, lo recibe a él, pero también el que los desecha, lo desechan a él. Entonces también ellos, en nombre de Cristo Jesús, traen beneficios a la humanidad, eso explica tanto regocijo y alegría que solo aquél que tiene el temor de Dios lo siente. Para aquellos que han recibido en sus corazones el reconocimiento a la elección, puesto por Dios en esa obra perfecta. Como dice en 1ª de Corintios 9:1: si para otros no soy Apóstol… Esa es la defensa que hizo, en la cual, a diferencia del Apóstol Pablo que se sintió solo cuando se vio precisado a defender su ministerio por primera vez, él no se consideraba así. A su lado están los hermanos, sus ministros capitanes y todo el pueblo del Señor, y que si el enemigo trabaja, también todos aquellos que comparten el sentir de proteger al pueblo de Dios. Para finalizar invitó a entonar a los coros unidos, el de El Salvador y el de Tabasco: la Iglesia del Dios vivo marcha… Fuente: Coordinación de Crónica Apostólica. Berea Staff, J.R.G. Share This Previous ArticlePresentación Apostólica en Oaxaca, Oaxaca Next ArticlePresentación Apostólica en Campeche, Campeche April 5, 2015