La alegría de acompañar al Apóstol de Jesucristo en su oración

Guadalajara, JAL. A 11 de mayo del 2019. (Berea Internacional).-

La Iglesia del Dios Vivo, Columna y Baluarte de la Verdad: La Luz del Mundo en la colonia Hermosa Provincia de esta ciudad, se vio bendecida en las primeras horas de esta mañana, cuando el Apóstol de Jesucristo Naasón Joaquín García, encaminó sus pasos hacia el templo sede internacional para elevar su oración de acción de gracias y adoración a Dios.

Al término de su oración, el Apóstol de Jesucristo, dirigió un consejo al grupo de ministros que le acompañaron en este día y recordó el mensaje que transmite la narrativa de “El Quijote de La Mancha”, la cual fue representada la noche anterior en una puesta en escena por los grupos de Hermosa Provincia en un evento en honor a su cumpleaños. Explicó que en esta obra de la literatura se resaltan los valores que el ser humano debe perseguir y mantener durante su vida, como buscar que los sueños se lleguen a realizar, y subrayó que en la Iglesia del Señor las metas no se quedan como un sueño, sino que vivimos para que nuestra vida como cristianos e hijos de Dios sea una realidad constante, porque nosotros nos maravillamos de la obra de Dios todos los días y vivimos esa vida en una realidad, sabiendo que no es un sueño.

El Varón de Dios también se refirió a la juventud que ha tomado la decisión de salir a la obra por diferentes regiones en el mundo, algunos de esos jóvenes han realizado su trabajo por un año y otros se han quedado más tiempo, la obra de Dios se ha ido multiplicando, porque cada año miles de jóvenes en la Iglesia cumplen sus 18 años y ponen su vida y servicio delante de Dios para trabajar en la expansión del Evangelio. Explicó que no importaba si su trabajo era de un año o más, en el tiempo que estuvieran trabajando para hablarle a las almas; una o más almas se acercarían al Señor y habrían cumplido su deber con la Iglesia.

Recordó que la vida y el trabajo en la obra no es fácil, que se tiene que luchar, y por mucho tiempo, y dijo: “Eso es lo que haremos, Dios también nos hace luchar para valorar las bendiciones que nos da”. Escuchó a los ministros hablar de las experiencias que han tenido en los diferentes lugares donde se encuentran y resaltó que, en algunos hermanos, por diferentes motivos, se habían ido a vivir lejos de la Iglesia donde asistían y Dios los volvía a encontrar en ese lugar donde iniciaba una obra con algún grupo de batallones que eran enviados ahí. Explicó que la obra de Dios es completa, en ocasiones pareciera que los hermanos llegan a algún lugar solos y ven que no hay Iglesia; pero el Señor se encarga de enviar obreros a diferentes lugares y muchos de esos hermanos que, pareciera se quedaron lejos de la Iglesia, vuelven a encontrarse con los jóvenes obreros que llegan a esos lugares e inician una obra con un grupo pequeño que después se convertirá en una Iglesia por la prosperidad y la promesa de Dios.

En ocasiones pareciera que esos hermanos o familias que se fueron lejos de la Iglesia donde asistían estaban alejados de las cosas de Dios; pero cuando encuentran a los obreros que llegan a ese lugar dicen: “Tal vez ande mal, pero es mi Iglesia, es la Iglesia del Señor, y tengo que ayudar”. Entonces esos hermanos se unen al grupo de obreros y trabajan junto con ellos para que la obra de Dios se lleve a cabo y prospere.

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